Proyecto original

Índice

1.- Introducción

2.- Vivienda y formas de vida

3.- Rituales funerarios en la Cultura del Argarç

4.- Primera campaña de excavaciones (1961)

5.- Segunda campaña de excavaciones (1963)

6.- Objeciones y problemas derivados de las primeras excavaciones

        6.1.- Contestación de Angel Luís Riquelme a las objeciones

7.- Propuesta de Ecoambiental S.L.L.

8.- Propuesta de acciones a desarrollar


 

1.- Introducción

El Puntarrón Chico es un cerro cónico y abancalado que se emplaza a las afueras del núcleo urbano de Beniaján (Región de Murcia), rodeado por el cauce de una rambla justo en la entrada del llamado Puerto del Garruchal, en la comarca murciana de la Cordillera Sur. Recibe su nombre del gran pico del Puntarrón, imponente y majestuoso cabezo de piedra rojiza que se eleva junto a él hasta los 380 metros de altura y en cuya cima los musulmanes instalarían una guarnición para controlar este paso entre el Valle del Segura y el Campo de Cartagena. Ambos montículos, el Puntarrón Grande y el Puntarrón Chico, integrados en la Sierra de Cañisola, han constituido desde siempre unos relieves emblemáticos, casi mágicos, para todos los beniajanenses.

Desde 1992, el cerro se engloba dentro del parque regional de El Valle y Carrascoy, por lo que cuenta además con unas medidas especiales de protección medioambiental.

La estratégica situación del Puntarrón Chico, en la que también destaca la existencia de un manantial documentado desde época romana y que hoy se conoce como "Mina del Agua", favoreció el asentamiento de los primeros pobladores de la zona, siendo éste el principal motivo por el que ha alcanzado fama. Aquí se erigió un importante poblado perteneciente a la cultura de El Argar, civilización incluida en la Edad del Bronce que se presentaría en toda la zona levantina española durante los años 1.700 al 1.200 antes de Cristo. La conformaban tribus que vivían en cuevas abiertas en la roca, siempre en colinas aterrazadas, conocedoras del barro cocido al fuego y que ya utilizaban piedras trituradoras a manera de molinetes.

En 1961 los propietarios del Puntarrón Chico decidieron aprovechar el abancalamiento del cerro para plantar frutales en sus laderas. Fue entonces cuando se hallaron los primeros restos del poblado, hasta entonces desconocido, cuya explotación arqueológica acabaría ofreciendo una rica y valiosa información sobre el modo de vida argárico. Este de Beniaján es un asentamiento prototípico, además de uno de los más importantes de toda la zona por donde se extendió El Argar.

Se rescataron muchos de los hogares, los cuáles aún permanecen en el lugar, pero los principales hallazgos fueron depositados en el Museo de Arqueología de Murcia, donde pueden ser contemplados: numerosas piezas de cerámica, cuchillos de sílex, punzones de hueso, brazaletes, sortijas, alabardas de cobre y bronce, e incluso enterramientos tanto en cista como en tinaja. Hacia el II milenio a.C apareció la metalurgia de la aleación del bronce. Los poblados aumentaron en extensión y sus estructuras defensivas se hicieron más complejas. La vida del colectivo se quedó inmersa en el interior del área habitación y los rituales funerarios se caracterizaban por las inhumaciones individuales, la mayoría dentro de los hogares o dentro de su perímetro.

Los restos argáricos encontrados en La Alberca y Beniaján constituyen claros exponentes de aquellos pueblos a los que a su estratégica ubicación se unió la explotación de los importantes filones metalíferos de la zona, traduciéndose en una serie de relaciones económicas características del sureste peninsular durante la Edad del Bronce.

Situado en la Sierra de Carrascoy, sobre un cerro de 253 metros, el yacimiento argárico del Puntarrón Chico define el primer referente de asentamiento humano en la pedanía de Beniaján. La vida funeraria que desvela este yacimiento sigue los parámetros característicos de los poblados argáricos del sureste peninsular, en los que el área de enterramiento coincide con el del poblado, el rito es de inhumación e individual con la deposición lateral y flexionada del cadáver en el interior de una caja de losas o cista.

(Fuente: Wikipedia)


2.- Vivienda y formas de vida

2.1.- La vivienda

Los muros son de piedra, y se adecuan y adaptan al relieve y características del terreno, las hiladas unas veces paralelas, alternan con otras que no lo son, para darle mayor consistencia.

Los techos los hacían con ramas y arbustos entrelazados fuertemente con cuerdas de esparto, en el caso del Puntarrón Chico horizontales, después se impermeabilizan con tierra láguena, también emplean esta en los suelos.

En cuanto a la disposición interior, se han encontrado huecos para sujeción de postes, bancos adosados, y en algunos casos evidencias de escaleras, por lo que cabe deducir la existencia de más de una planta.

Su finalidad, en primer lugar, habitabilidad, esteras de esparto, hogares, gran cantidad de cerámicas, huesos de animales, herramientas de hueso piedra o metal, trabajos de esparto como capazas, hogares rodeados de piedras, circundados por tierra cocida, también eran utilizadas como taller, de cerámica o metal, con la presencia de moldes de piedra, y molinos para triturar grano, así como hornos, por último la casa era usada para enterrar a sus muertos, de forma individual o doble lo que implica vida monogámica, para muchos investigadores.

2.2.- Agricultura

Restos documentados de trigo, cebada, lenteja, garbanzo, lino, ...

2.3.- Restos de fauna

Ciervo, jabalí, oveja, cabra y perro.

2.4.- Manufacturas

Albardín y esparto son trabajados y usados para casi todo -calzado, vestido, herramientas, esteras, cuerdas-.

2.5.- Cerámica

Gran nivel de especialización, con nuevos estilos y tipos , como por ejemplo la copa, vasijas carenadas, cuencos, grandes vasijas, tinajas, urnas de enterramiento con formas diversas, vaso campaniforme.

2.6.- Metalurgia

Lo más destacable fue el descubrimiento de la fundición -uno de los hitos de la actividad humana y del progreso de la civilización- con la práctica efectiva de la aleación de los metales. El cobre y el estaño fundidos que darán el carácter más distintivo a todo este periodo: La Edad del Bronce. Muchos poblados están próximos a las minas, aunque el trabajo con el mineral siempre se realiza en los poblados, donde están los hornos y crisoles, en algunos casos bastante alejados de los yacimientos.

Su finalidad la fabricación de:

2.7.- Piedra

Se sigue utilizando con muchas aplicaciones: sierras, molinos, morteros, martillos, crisoles, moldes de fundición, afiladeras, …


3.- Rituales funerarios en la Cultura del Argar

Las señas de identidad de estas comunidades fueron muy singulares, las dataciones hechas a partir del carbono 14 dan una edad desde el 2150- 1600 a d. C. (zona de Lorca) Los enterramientos se realizaban preferentemente en:

Estar situados en uno u otro lugar está directamente relacionado con la posición social del inhumado, y los tipos de enterramientos encontrados son:

Las tumbas más importantes fueron abiertas más de una vez, en espacios de tiempo bastante largos, y se introducía algún otro cadáver, generalmente de distinto sexo -indicación de parejas- o huesos de animales -cabras u ovejas- con fines rituales. Este hecho indica la necesidad de la señalización de los enterramientos, a fin de realizar celebraciones rituales, a veces con una posterioridad de más de cien años.

La mayor profusión de enterramientos se dan en los poblados nucleares de altura, siendo mucho menores en los poblados dependientes, (zonas agrícolas).

Esta manifestación da una idea cierta de status, ocupando el más alto normalmente, hombres en cista con importante ajuar, mujeres en cista con ajuar, infantiles, cista y ajuar, urnas o pithois, en la misma escala, hasta la más baja, cautivos o esclavos, en recovecos exteriores.


4.- Primera campaña de excavaciones (1961)

Este es el resumen de la primera campaña de excavaciones realizadas en el Puntarrón Chico de Beniaján.

El descubrimiento se produjo en Julio de 1961, en un principio se ocultó.

Primera prospección el 30-11-1961 encontraron:

Primera Campaña de excavaciones -3 al 28 de Mayo de 1962-

Relación de cistas a fin de la primera campaña:

Relación de urnas:

Observaciones

Importancia

 “Por la gran extensión del poblado y su situación estratégica... y ser núcleo urbano importante...y estar abocado su emplazamiento a una explotación tan costosa como es la de agrios, sería conveniente una más amplia excavación en un futuro próximo.”  
Eugenio García Sandoval. Manuel Jorge Aragoneses. Matilde Escortell


5.- Segunda campaña de excavaciones (1963)

Este es el resumen de las actuaciones llevadas a cabo durante la segunda campaña de excavaciones arqueológicas en el yacimiento argárico de "El Puntarrón Chico" de Beniaján.

Fechas de realización: 18 de Octubre-22 de Noviembre de 1963.

Equipo:

La primera campaña, de la que no disponemos más que los datos de este informe, referidos a ella, finalizó el 28 de Mayo de 1963.

Fechas referidas por hallazgos:

- 18 de Octubre:

- 20 de Octubre:

- 23-31 Octubre:

- 31 de Octubre- 4 de Noviembre:

- 11-22 Noviembre:

(Fuente: “Noticiario Arqueológico Hispánico” cuadernos 1-3 Madrid 1964)


6.- Objeciones y problemas derivados de las primeras excavaciones

Extraído de "La Cultura del Algar. Un modelo para el estudio de las formaciones económico-sociales prehistóricas" (pags. 342-347) por Vicente Lull.

Después de describir ubicación y características generales de yacimiento del Puntarrón Chico, siendo un total de 23 sepulturas, 19 cistas y 4 urnas, que las numera del T.1 al T.23 -según García Sandoval- dice:

En resumen:

Sobre el material del poblado si poseemos pruebas de su actividad productiva:

 

6.1.- Contestación de Angel Luís Riquelme a las objeciones

Extraído del nº 31 de la revista Cangilón (Diciembre, 2008), pags. de la 186 a la 194, por Angel Luís Riquelme, Director del Museo de la Huerta de Murcia (Alcantarilla). Pinchar en las imágenes para ampliar:


 

7.- Propuesta de Ecoambiental S.L.L.

Después de analizar los caracteres definitorios de La cultura del Argar en general, y de las actuaciones llevadas a cabo en el yacimiento del Puntarrón Chico, creemos que ha llegado el momento de retomar y sacar a la superficie esta realidad cultural, tanto tiempo olvidada, en la mayor parte de los casos ignorada, que sitúa esta zona en el origen de la civilización en la Península Ibérica, donde se enmarcan, como consecuencia, los primeros vestigios de una organización social compleja, desde el punto de vista del primer hábitat sedentario, y las primeras manifestaciones inherentes al mismo: vivienda, agricultura ganadería metalurgia... y encauzar, desde múltiples motivaciones, (culturales, etnográficas, antropológicas) una acción adecuada de recuperación de nuestro patrimonio histórico, integrada totalmente en un contexto de sostenibilidad medioambiental.

Hoy en día, los conceptos y métodos de intervención arqueológicos distan una enormidad de los que se aplicaron hace 50 años en el yacimiento del P. CH. Será pues cuestión de hacer un análisis de las ventajas que ello conlleva, seleccionando aquellos métodos y actuaciones más adecuados, y superando así los problemas derivados del contexto de las primeras excavaciones.

Es una labor que tan sólo puede realizar un equipo humano comprometido e integrador, con experiencia en actuaciones y trabajos de campo, capaz de movilizar voluntariado y conseguir apoyos de administraciones e instituciones durante un tiempo prolongado, lo que implica la creación de un foro que coordine la actividad, dotándola de marco legal.

Realizar esta labor, desde nuestro punto de vista, es una obligación, como homenaje a nuestros antepasados, y derecho de nuestros hijos.


8.- Propuesta de acciones a desarrollar

8.1.- Sensibilizar

8.2.- Investigar

Localización y búsqueda de datos sobre el momento del descubrimiento, y los abancalamientos producidos en la zona objeto de estudio -repoblación forestal y aprovechamiento agrícola- en este sentido sería importante:

8.3.- Excavar

Solicitar la tutoría del organismo administrativo encargado del Patrimonio Cultural a fin de conseguir la participación de personal técnico cualificado en la dirección de las labores de análisis previo y trabajos de excavación posteriores en:

8.4.- Restauración del paisaje agrícola argárico

8.5.- Delimitación de un marco de integración medioambiental

Será fundamental para todas las actuaciones, no se trata sólo de poner en valor hallazgos arqueológicos, y sensibilizar sobre su importancia, hemos de conseguir la realización de este proyecto mejorando las condiciones que favorezcan la biodiversidad.

Es un paso más en el concepto de restauración, de un entorno histórico único e inigualable, será preparar las directrices básicas que habrán de respetar todas las actuaciones.

Normas que todos los actuantes acatarán, así como todos los participantes y visitantes, para que el proyecto sea, asimismo, una contribución al respeto y mejora de la biodiversidad.